lunes, 14 de noviembre de 2011

EL MILAGRO JAPONÉS

Amén de la historia económica, lo de este pueblo no tiene límites. Hace 8 meses de los desastres del terremoto, sunami y accidente nuclear y Japón ha empezado a crecer, y sólo por recordar el desastre se calculó en unos 330.000 millones de euros.
No sería bueno fijarnos en como hacen las cosas para vencer las crisis, porque lo suyo si que fue una crisis.
Mucho habla la historia del milagro japonés, y claro que tiene que ver su cultura, pero no olvidemos que ellos están sujetos como nosotros al mercado internacional, a las crisis de confianza....
Pero me gustaría lanzar algunas ideas de como afrontaron la reconstrucción de su país, después de su derrota en la Segunda Guerra Mundial y ver si podríamos copiar algunas de sus actuaciones.
Japón es una "pequeña" isla, sin materias primas y una escasa agricultura (muy productiva) y un sector pesquero desarrolladísimo; creo estar en disposición de decir que en estas características les superamos con creces, como punto de partida no está mal, si bien nuestra agricultura siendo muy importante no es muy productiva y está sujeta al intervencionismo europeo.
Pero sigamos, Japón basó su recuperación en unos niveles de vida bajos, con costes salariales muy competitivos y en el que la gran mayoría de su población estaba en edad de trabajar (60% población entre 15 y 59 años), aquí es donde nosotros no podemos seguir, nuestro nivel de vida es especialmente alto (Estado del bienestar) y tenemos una población envejecida. Ni que decir tiene el alto coste de mantener a una población envejecida, no sólo vía pensiones, sino también con el alto coste sanitario que ello implica, pero además en los últimos años se ha venido promoviendo las prejubiliaciones, con lo que incrementa esa masa ya grande de por sí, de personas que no producen.
La cultura japonesa aboga por proyectos de grupo y solidaridad, no prima el individuo, y esto lo llevan a todos los aspectos de la vida incluso al empresarial, las decisiones empresariales, las toman quienes a mi modo de ver las deberían de tomar en cualquier empresa su factor humano, esto es, no sólo los directivos y gestores, además deberían de decidir los trabajadores, lo que ellos llaman sindicatos empresa. Claro que la política laboral es completamente distinta, los japoneses siente la empresa en la que trabajan como su segunda familia, y da prestigio social el trabajar, por otro lado las empresas ven al trabajador como un recurso permanente al que no se despide en situaciones difíciles y por otro lado prima la antigüedad ante el nivel educativo o las características del puesto a la hora de fijar los salarios.
Todo esto a nosotros nos parece una utopía, pero yo creo como ya he expuesto en otras publicaciones, que la única forma de salir de las crisis es trabajando, y parece que la cultura que más sabe de ello es la japonesa, sino como iban a lograr crecimientos superiores al 10%.
Algo que también hacen por encima de la media mundial es ahorrar, si señores, los japoneses ahorran un 17% de sus rentas, ahorro que se canaliza hacia la industria a través de la banca, intervenida por el Estado en algunos aspectos, como este precisamente. Esto unido a que las empresas no tienen por objetivo enriquecerse, sino expandirse, innovar...hace que la economía japonesa fuera muy potente, basada en crecer y no en enriquecer a unos pocos y especular.
El papel del Estado es el de generador de externalidades, propiciando exportaciones, obligando a la banca a ofertar a la industria capital a bajos tipos de interés, incentivando fiscalmente a empresas exportadoras...en definitiva propiciando el crecimiento, y tratando de no poner trabas a las industrias de su país.
Esto ya no es una utopía para nosotros, es simplemente culturalmente inalcanzable, nosotros somo absolutamente individualistas, buscando el prestigio en los coches de lujo y el alto nivel de vida, nuestras empresas buscan el enriquecimiento de sus accionistas y el Estado pone numerosas trabas burocráticas a cualquier empresa, y por supuesto no obliga a la banca a poner en circulación préstamos que activen la economía (algo que nos hace falta desde hace varios años), eso sí pone fondos a su disposición para que no quiebren, y como ya he dicho en varias ocasiones, ¿no son sociedades mercantiles como cualquier otra?.

En fin resumiendo, algunas medidas que seguramente ayudaran a salir del charco:

1.- Yo creo que fundamental, TRABAJAR, y para ello quizás tengamos que echar más horas y ganar menos, pero todos, el empresario, que tendrá que ir a margenes razonables, el trabajador que tendrá que recibir lo mismo por más trabajo y el Estado que tendría que bajar sus cuotas de Seguridad Social e incluso bonificar la contratación.
Dentro de este apartado no puedo dejar de abordar el empleo público, aquí no sólo hay que obligar a TRABAJAR, sino que habría que reestructurar un sistema funcionarial completamente obsoleto, en el que el trabajador no sólo no se implica, sino que se acomoda, y esto simplemente no puede ser. Por supuesto que no todos, estoy seguro de que dentro de los funcionarios hay grandes trabajadores, pero no se puede primar el que un puesto sea vitalicio haga lo que haga, por el mero hecho de aprobar un examen, si que debe de ser vitalicio, pero por ser un buen trabajador implicado en el funcionamiento de la Administración y el servicio al ciudadano.
TODOS tenemos la obligación moral de sacar al país de la crisis, no debería de haber sitio para parásitos sociales, no podemos permitirnos, tener a grandes cerebros prejubilados con 50 años paseando por los parques y con grandes indemnizaciones, como tampoco nos podemos permitir más jefes que indios, tenemos la administración cuadriplicada, un motón de dirigentes políticos...menos jefes y más indios.
2.- Hasta cuando vamos a permitir que dirijan el país los bancos, ya está bien, de que estos esten sólo para financiar campañas políticas, claro luego estos cuando lleguen al poder.....
La banca de este país tiene la OBLIGACIÓN de financiar a las empresas, que son las que impulsan la economía, crean riqueza y puestos de trabajo, y si ellos no siente esta obligación moral, el ESTADO tendrá que intervenir, y obligarlas.
Ya está bien que con la que está cayendo veamos todos los días contratos blindados por cientos de miles de euros, hasta en la "banca pública", señores, no necesitamos directivos con contratos blindados, necesitamos directivos que dirijan.
3.- Expandirse, modernizarse, salir al exterior... otra OBLIGACIÓN esta vez de nuestros empresarios, no podemos estar pensando en distribuir beneficios para captar más inversores en nuestra compañía y que sea la más importante del IBEX 35, nuestras empresas, sobre todo las grandes tienen la obligación moral de investigar, innovar, crecer, exportar.... todos sus beneficios deberían de ir aquí.
4.- Nuestros políticos, que sobran muchos, cuando van a dar facilidades para la creación de empresas, la contratación de personal, la internacionalización, la innovación...en definitiva para la activación de la economía. No es posible seguir tirando el dinero público en obras públicas que no necesitamos para nada (plan E), en crear Ministerios inútiles (Vivienda, Igualdad...), y encima poner trabas a cualquiera que quiera iniciar una aventura empresarial (y digo bien, aventura), este es el país de la burocracia.
En fin a lo mejor no nos podemos permitir un Estado del Bienestar, o al menos como el que tenemos, no podemos soportar más esta situación. Está claro que para salir de esta, nos tenemos que implicar todos, pero lo primero es TRABAJAR y esto lo debemos de hacer todos, ciudadanos, políticos, funcionarios...que habrá que cambiar el modelo, pues es casi seguro, pero eso son medidas a medio, largo plazo.

viernes, 4 de noviembre de 2011

LAS INVERSIONES EN PERIODOS DE CRISIS

Bueno, bueno, la pregunta del millón. ¿En que invertir en periodos de crisis?.
Quién no ha oido que en bolsa a largo plazo no se pierde nunca, o que los plazos fijos no dan ni un duro....
Antes de nada un ejemplillo, imaginemos que el 1 de enero de 2008 (ya con la crisis bastante afianzada), tres amigos invertimos 6.000 euros (somos pequeños inversores).
El primero un avispado analista de bolsa invierte cantidades de 1.000 euros en 6 afamadas compañías españolas todas ellas cotizando en el ibex 35, Acciona, Bbva, Iberdrola, Santander, Endesa y Acs, lo que tendría el 4 de noviembre serían 31,88+375,90+487,50+396,89+471,25+662,48= 2.425,90.
El segundo movido por la ascendente subida del oro en 2007 (más del 30%) se la juega con este mineral, y hoy tiene 10.500.
El tercero un ahorrador con aversión al riesgo lo ha ido invirtiendo en plazos fijos anuales que fue renovando, hoy tiene unos 7.000.
A la vista de estos datos parece, que habría que haber invertido en oro, pero yo no estoy tan de acuerdo,  al menos seguir haciendolo, así como tampoco creo que las acciones de las compañías antes mencionadas no suban gradualmente en un horizonte no muy lejano.
Parece que en estos tiempos tener los ahorros en inversiones seguras, aunque no muy rentables, es del todo acertado, ya que los escenarios son muy volátiles y complejos.
El alza del oro es debido en parte a la desconfianza con los valores y acciones, pero la volatilidad de los minerales es grande, hay quien habla de burbuja, aunque siguiendo razonamientos puramente económicos, tendrían que subir indefinidamente, ya que mineral hay el que hay y demanda de este cada vez más. (el mineral no crece, pero la población si).
En fin amigos, mi consejo es que si no queremos disgustos, hay que ser muy precavidos en nuestras inversiones, y los mercados financieros no son el mejor lugar donde buscar esa precaución, o al menos en estos tiempos.